Hace casi un año que tuvimos que implementar la modalidad de educación a distancia. Nuestra presencia física en el ITAM se tuvo que pausar, pero nos hemos mantenido en contacto y demostramos nuestra capacidad de adaptación y resiliencia. Nuestra facultad aprendió a dar clases en línea, los estudiantes asisten, participan y demuestran que la universidad la hacemos nosotros y que es posible aprender y fortalecer nuestros vínculos comunitarios aún en la distancia. Y no menor ha sido el esfuerzo de nuestro personal administrativo, que ha mantenido la mayoría de servicios y actividades en pleno funcionamiento.

La mejor prueba del compromiso de nuestra comunidad con la excelencia académica y la excelencia humana, tan necesarias para remontar los desafíos que vivimos en México y en el mundo, son el cúmulo de webinars, actividades, clases, eventos exitosos como el Becatlón, nuestro Bazar ITAM y la celebración de los graduados acompañados de los tradicionales Mariachis, así como muchos otros eventos especiales que han organizado tanto estudiantes como profesores, enteramente en línea.

Queremos externarles un mensaje de esperanza. Creemos firmemente que la creciente disponibilidad de vacunas permite que empiece a ser visible la luz al final del túnel y que, más pronto de lo que esperamos, todos nosotros podremos regresar a nuestras instalaciones. No obstante, aún no existe una certeza plena de cuándo volveremos, únicamente lo sabremos una vez que se establezca el semáforo verde por parte de las autoridades responsables.

Como informamos en nuestro Newsletter de noviembre de 2020, una vez que se determine la fecha para nuestro retorno, daremos aviso con una antelación mínima de un mes para permitir cualquier tipo de preparación previa.

Queremos invitarles a mantener el contacto y a no esperar nuestro retorno para estrechar lazos con quienes estamos pasando el confinamiento, a continuar involucrados en nuestras clases y a reforzar nuestro compromiso y cariño por el ITAM.